Siempre he sido muy bueno recordando fechas, aunque últimamente me he dado cuenta de que hay algunas que he empezado a olvidar. La de hoy, no. Llevaba semanas rondándome la cabeza, aunque procurando no pensar mucho en ella.
Hoy mi padre habría cumplido 77 años. Y hoy es el primer cumpleaños que no le podemos felicitar.
Hace justo un año, le pregunté que cuántos cumplía y me respondió que 76. “A esa edad murió mi padre”, me dijo. Y yo medio le grité que no fuese gilipollas y que no pensara en eso. Pero lo cierto es que lo pensaba.
No suelo escribir demasiado ni en el blog ni en redes sociales sobre este tema. Es más, prácticamente tampoco lo hablo en persona. Y si lo hago, procuro sonreír mucho.
Pero hoy me apetecía soltar unas cuantas palabras al mundo. Un feliz cumpleaños, un te echo de menos. No sé. Imagino que al no poder decírselas a la cara, escribirlas cobran cierto sentido.
Pues eso. Que feliz cumpleaños, papá.
Muchos ánimos!
Te comprendo muy bien. Mi padre hubiera cumplido 72 años el próximo 26 y hace casi quince que no está entre nosotros. Cuando pasa el tiempo te das cuenta de todas las cosas que te gustaría haberle dicho y que ya no puedes. Escribirlas, como bien dices, es una manera de soltarlas.
Te mando un abrazo muy, muy fuerte.
Felicidades, como te quiero, te echo tanto de menos.
Es cierto, escribir nos ayuda a desahogarnos de cosas que no decimos con palabras, es la magia de la escritura, jeje. Un abrazooo.
Mis padres me faltan hace mas tiempo que a ti, y, una vez pasado el luto emocional y la tristeza ,ha llegado la templanza de recordarlos , la ternura de los momentos, los perdones al reconocer con el tiempo que los padres son humanos y ahora SONRIO con ellos, y doy gracias a la vida de que me los pusiera en mi camino.