Solemos vivir identificados al 100% con nuestra mente. De hecho, creemos que nosotros somos nuestra mente. Y, por lo tanto, nos dejamos llevar por lo que ésta nos dice a cada momento, por todos esos pensamientos que van y vienen continuamente. Tanto es así que los damos todos por verdaderos. ¿Pero y si te dijera que tú no eres tu mente? ¿Y si te dijera que tu mente te engaña? ¿Y si te dijera que tu mente en realidad es como Twitter?
Sí, has leído bien. Tu mente es como Twitter. Imagina que basas tu actividad diaria, tus emociones y tus decisiones en lo que se publica a cada momento en tu timeline de Twitter. Te parece una locura, ¿cierto? Pues te aviso que es lo mismo que estás haciendo a diario, dejándote llevar por esos miles de pensamientos con los que tu mente te bombardea a diario.
60.000 pensamientos al día
Si prestas atención durante un buen rato a lo que se publica en Twitter, podrás comprobar que de forma incesante aparecen tuits positivos, otros negativos, algunos que opinan, otros que critican, unos que juzgan, otros que atacan e incluso hay tuits que se inventan lo que sea necesario, aun siendo mentira, para llamar la atención.
También hay tuits que igual que llegan, se van, mientras que hay otros que de buenas a primeras ganan popularidad y se llenan de favoritos y retuits, adquiriendo una gran importancia. Tanto es así que pueden llegar otros tuits a favor o en contra, generando una gran polémica, que tal vez en la realidad no sea tan relevante.
Pues todo esto ocurre exactamente igual en tu propia mente.
No sabría decirte cuántos tuits pasan al día por tu timeline, pero sí puedo decirte que se calcula que a diario pasan por tu mente unos 60.000 pensamientos que, al igual que los tuits, son de todo tipo.
https://www.youtube.com/watch?v=JcOBWMgq0g4
Tú no eres tu mente al igual que no eres tu Twitter
La diferencia radica en que de Twitter te alejas en cualquier momento, apagando el ordenador o dejando el móvil encima de la mesa. En cambio, tu mente va contigo en todo momento, hasta el punto de que te pasas la vida identificándote con ella y con esos pensamientos que te lanza.
Pero al igual que tienes claro que tú no eres Twitter y que te puedes alejar de esta red social, debes tener claro que tú no eres tu mente y que también puedes alejarte de su contenido.
Entonces, si no eres tu mente, ¿qué eres? Muy sencillo: eres esa consciencia que está por encima y que es capaz de observar esos pensamientos. O en términos tuiteros, eres esa persona que está observando lo que ocurre en su timeline de Twitter desde delante de la pantalla del ordenador o el móvil.
Si hubiese una pantalla entre tú y tu mente, te resultaría mucho más sencillo dejar de identificarte con ella. Así que te toca poner de tu parte para no dejarte arrastrar por el flujo de pensamiento.
Toma las riendas de tu vida
Ha llegado el momento de que sea tu consciente, o sea tú, quien arrebate las riendas de tu vida a tu mente, para coger el control de una vez por todas. Empieza por asumir que no eres tu mente e integra esta imagen de que en realidad esos pensamientos son como Twitter.
Tu mente te va a decir muchas cosas, pero no todas son importantes, ni reales, ni te sirven para lo que deseas vivir. Así que presta atención y escoge solo aquellas que de verdad te sean de utilidad. Además, introduce de forma consciente pensamientos que te potencien para alcanzar tus objetivos convirtiéndolos en Trending Topic.
Para que todo esto te resulte más fácil, te aconsejo que introduzcas la práctica de la meditación en tu rutina diaria. Con solo diez minutos al día, pronto verás como adquieres un mayor control sobre tu mente. Solo tienes que ser constante.
¡Ánimo y a por ello!
Si deseas tener una sesión de diagnóstico gratuita para empezar tu proceso de Coaching, no dudes en contactar conmigo.